TERAPIAS

PSICOTERAPIA COGNITIVA CONDUCTUAL

La intervención mediante la  psicoterapia cognitiva conductual tiene como objetivo el alivio del sufrimiento emocional mediante la modificación de patrones mentales y de comportamiento que son poco adaptativos.

A partir de la demanda de tratamiento se realiza una evaluación de los síntomas para identificar los patrones de pensamiento, las conductas y el sufrimiento emocional que producen. El objetivo en esta primera etapa es ayudar al cliente a identificar cuando se activan estos patrones y desarrollar nuevos recursos personales para cambiar esas conductas.  El paso siguiente es la comprensión del sufrimiento dentro de la historia evolutiva de la persona.

En este proceso el cliente es guiado hacia un cambio que permite alcanzar objetivos y trayectorias personales, mejorar la calidad de vida y el entorno de relación.

La psicoterapia cognitiva conductual requiere de la participación activa del cliente en las experiencias propuestas, con el objetivo de integrar los aprendizajes desarrollados durante la sesión en la vida diaria y observar de forma experiencial los resultados.


TERAPIAS DE TERCERA GENERACIÓN: ACT, TIP Y MBCT

Son una evolución de la terapia cognitiva-conductual en la que el contexto y las funciones de los fenómenos psicológicos están también presentes.  Se enfatiza en el uso de estrategias de cambio basadas en la experiencia y en el contexto.

El foco de la terapia pasa de centrarse en el síntoma y su desaparición, al desarrollo de una mayor capacidad de adaptación y una flexibilidad en los patrones de respuesta.

  • Los objetivos de la Terapia de Aceptación y Compromiso, abordan el trastorno de evitación experiencial, fomentando la aceptación teniendo en cuenta los valores personales del cliente. Los conceptos clave de la terapia de aceptación y compromiso se pueden resumir en:
    • El sufrimiento psicológico es “normal” y adaptativo, es importante y acompaña a cada persona
    • No es posible deshacerse voluntariamente del sufrimiento psicológico, peor si se pueden tomar medidas para no aumentarlo artificialmente.
    • El dolor y el sufrimiento son dos cosas diferentes
    • Puedes vivir una existencia dictada por tus propios “valores”, trayectorias personales y calidad de vida, comenzando desde ahora, manteniéndote en contacto y participando en el momento presente. Para ello, tendrá que aprender a salir de su mente y entrar en su vida.
  • La Terapia Integral de Pareja (TIP) otorga gran importancia a la historia personal de los miembros de la pareja; a pesar de que los problemas se produzcan en el presente, es la historia y las experiencias de cada uno lo que determina sobre que contenidos y conflictos y con qué frecuencia surgen. Las llamadas vulnerabilidades  que podríamos definir como aquellas circunstancias que afectan especialmente a cada uno de los miembros de la pareja y que hacen mucho más probable que surja el enfrentamiento. Pone el énfasis en tres aspectos fundamentales:
    • El análisis funcional como forma de evaluar los problemas de pareja
    • Refuerzo natural para desarrollar una motivación que las simples reglas no garantizan
    • Importancia del contexto en el que surgen los problemas, se tienen en cuenta las historias evolutivas personales a la hora de considerar los problemas actuales
  • Terapia Cognitiva basada en Mindfulness: la psicología contemporánea ha adoptado la práctica de la meditación como una técnica para incrementar la conciencia y para responder de forma más adaptada a los procesos mentales que contribuyen al desarrollo de trastornos psicopatológicos y de comportamiento.

Mindfulness es conciencia no analítica, centrada en el presente. Es un proceso no crítico, que evita elaborar juicios valorativos (autoculpa).  Un estado de aceptación radical de toda la experiencia tal cual se presenta, que redirige la atención hacia las potencialidades innatas.


PSICOTERAPIA HUMANISTA INTEGRATIVA

La Terapia humanista integrativa es una corriente psicológica que pone atención al lado positivo y al potencial del ser humano, entendiendo que todas las personas en algún momento del su vida tendrán problemas, dificultades y necesidad de apoyo pero sin categorizarlo como enfermedad mental, sino formando parte del propio proceso de desarrollo vital.

La base sobre la que se realiza la intervención es el vínculo terapéutico que se establece entre el psicólogo y el cliente.  Este vínculo va a permitir un espacio de acompañamiento seguro que facilita la exploración de espacios dolorosos, el reconocimiento de necesidades, abordar el pasado desde una perspectiva de presente, permitiendo sanar y recuperar las potencialidades de la persona.

A través del proceso, la persona aprende a conocerse mejor, descubrir aquellas áreas más dolorosas para afrontarlas y tomar decisiones de forma más libre lo que le permitirá ganar autonomía personal para poder enfocarse en sus propios objetivos vitales.

 

Guardar

Guardar